El arte de los postres

"La mejor parte del menú"
.Cuando se habla de postres se entiende alguna preparación dulce, bien sean cremas, tartas, pasteles, helados, bombones, etc. Por extensión se denomina postre a cualquier comida dulce, incluso si su objetivo no es ser ingerido al final de la comida, como sería el caso de las galletas o las magdalenas.
Cómo montar un buffet de postres | The Gourmet Journal: Periódico ...

Un poco de historia
Desde siempre los postres han tenido un sentido maravilloso, mágico y lleno de ilusión para los niños. Inclusive muchos adultos no pueden pasar el día sin probar algún delicioso dulce. De hecho, los postres se han convertido en un complemento ideal en toda gastronomía. El origen de estos azucarados alimentos se remonta a tiempos inmemorables, pero uno de los postres más solicitados y con historia es el chocolate, cuyo origen fue en América, donde era consumido por los indígenas aztecas. Los españoles al probar el "chocolat", que es como le llamaban al chocolate los aztecas, quedaron gratamente sorprendido y lo llevaron a Europa donde fue procesado y transformado en el tradicional chocolate que conocemos hoy día.

Otro postre de historia conocida son los helados. Se sabe que antiguamente se recogía nieve de las montañas y se endulzaban con miel, siendo este uno de los más cotizados postres, sobre todo en temporadas con mucho calor. Muchos reyes y monarcas eran verdaderos adictos a este postre, al extremo que aquellos que eran asignados a la tarea de recoger la nieve eran severamente castigados si su preciosa carga llegaba a derretirse. Hoy día, existen gran variedad de tipos de helados que satisfacen el gusto de todos los consumidores.
La existencia de los postres se encuentra marcada por una enorme variedad de tipos y estilos. Se puede escoger postres que no son más que simples golosinas como el algodón de azúcar y los caramelos, hasta aquellos que son verdaderos alimentos como es el caso de las tortas y de los quesillos.

Postres que no engordan

Dulce y frutas
¿Quién dice que hacer dieta y los postres están reñidos? Debido a que el broche de oro de toda buena comida es el postre, es necesario saber elegirlos. En general lo conveniente es optar por uno bien sencillo luego de un plato complejo y, en cambio, tentarse con uno más elaborado luego de un menú más frugal.

Para aquellas personas que se encuentran en un tratamiento para bajar de peso o plan de adelgazamiento, los postres bajas calorías, listos para ser consumidos son una buena alternativa, siempre manejados con moderación. Es importante tener en claro que no son de libre consumo, pues no es que no aporten calorías, sino que son reducidos en su contenido de azucares y grasas. La excepción a todo esto es la gelatina light que puede consumirse libremente ya que solo aporta líquido.

Existen una serie de ingredientes que ayudarán a la hora de no subir kilos… precisamente por ingerir o comer alguno de éstos.

El azúcar de dieta es una buena solución para confeccionar postres, pues hay marcas que permiten reemplazar 3 cucharadas de azúcar por una sola de endulzante, con la, obviamente, consiguiente reducción de calorías.
El azúcar de las frutas es mucho menos calórico pero de absorción lenta. Por ello, muchos postres de dieta, se basan en frutas. No obstante, no se puede abusar de ellas, porque, por ejemplo, una simple manzana de tamaño mediano viene a pesar unos aproximadamente 200 gr., y su aportación calórica es de unas 120 calorías.
Si hay elección, y se puede, conviene inclinarse más por frutas más ligeras.
Igual que el azúcar, la miel engorda, pues no hay que engañarse en esto. En cualquier caso, eso sí, es mucho más sana.
Claras de huevo montadas a punto de nieve proporcionan pocas calorías y un importante volumen a los postres. Asimismo, endulzadas con productos de dieta, se convierte en un elemento de primera categoría en la confección de nuestros postres caseros.
Tarta de frutas con crema pastelera - Receta tarta de frutas perfecta

Tal vez se ha preguntado si después de comer puede disfrutar de algún tipo de alimento dulce. Después de comer se puede consumir un postre por la propiedad de dulzor que satisface el tener la apreciación del sabor dulce, después de consumir alimentos salados, amargos o ácidos. No por postre se entiende que deben ser pasteles de chocolate, con merengue... una buena opción pueden ser las frutas, los frutos secos, los caramelos verduras o bien un vaso de agua con sabor a fruta. Es importante recordar que necesitamos tener una alimentación variada y equilibrada y por supuesto no abusar de los postres.

Se puede considerar como buenos ejemplos de postres saludables y nutritivos la fruta fresca de la estación, frutos secos (nueces, almendras, cacahuates, pistaches, etc.), la gelatina preparada con agua o leche y ciertos tipos de postres con lácteos. En cuanto a los cereales una buena opción de postre puede ser una rebanada de panqué de nuez, zanahoria o naranja, evitando el exceso de betún, glaseado o crema dulce. Otra buena opción rica y saludable son las galletas sencillas como las Marías, y las tartas de frutas. Para el consumo de helados, estos deben ser hechos a base de agua o paletas heladas ya que estas no contienen grasa y normalmente están preparadas con fruta natural, aunque este tipo de postres se deben consumir en poca cantidad y de manera ocasional.

Receta: Postre con topping de frutas | Demos la vuelta al díaEl consumo de postres también debe adaptarse a las diferentes etapas de la vida, ya que algunos postres son más recomendables para niños en edad escolar, comer fruta picada como jícama, pepino y zanahoria, o bien algún puré o gelatina de sabores; para los adultos mayores son recomendables aquellos postres que se puedan masticar y digerir con mayor facilidad como las gelatinas. El uso de sustitutos de azúcar deben ser utilizados exclusivamente para el control del azúcar, en caso de padecer diabetes, intolerancia a la glucosa, sobrepeso u obesidad y siempre bajo vigilancia nutriológica y médica. Cuando se lleva una alimentación saludable que satisface las necesidades del organismo y sin padecimientos de por medio no es necesario el uso de sustitutos de azúcar. Para poder disfrutar de algún tipo de postre en el caso de productos industrializados es muy importante leer la lista de ingredientes antes de consumirlo para saber el tipo de grasas que pudiera contener el producto. Evitar las grasas trans y las saturadas de origen animal y cierto tipo de grasas vegetales que por naturaleza son saturadas. Además antes de adquirir un postre industrializado es necesario fijarse que algunos postres que anuncian como bajos en grasa son ricos en azúcares y sodio. No siempre los “postres dietéticos” resultan la mejor opción, el tener la idea de de que por ser dietéticos son ricos y saludables, consumiendo estos productos regularmente y en porciones más grandes.

Por último si es de las personas que disfrutan preparar sus propios postres esta información le será útil: para evitar que se pierdan algunas propiedades nutritivas de los alimentos, se deben evadir las temperaturas altas y de aceite para la preparación, tener cuidado de no cocer demás la fruta y aprovechar el fruto y caldillo que queda después de cocerla para utilizarla en el mismo postre o en otro.

No es malo el comer postres, sólo elija la opción más saludable que se adapte a su estilo de vida, a sus gustos, siempre cuidando el exceso y aquellos que son altos en grasa saturada y azúcar. Algunos consejos:
  1. En lugar de azúcar blanca. Utilice azúcar mascabada o piloncillo.
  2. Prefiera harina integral o con mayor contenido de fibra en vez de harina refinada.
  3. Utilizar fruta fresca en la medida de lo posible.
  4. Evitar el exceso de frituras.
  5. No vuelva a utilizar el aceite que ya ha sido utilizado con anterioridad para freír.
  6. Disminuya la cantidad de glucosa, azúcares en general y jarabes.

Los postres y sus calorías
    En el universo calórico, los postres, los dulces y las golosinas son los soberanos. No hay individuo o sujeto capaz de resistirse a su poder y, por ende, todos recurren a la magia de las matemáticas para poder disfrutar cualquier manjar de azúcar. Los números, claro, sirven para el ejercicio de suma y resta: se restan calorías de otros alimentos para, así, poder sumarlas, más bien “invertirlas”, en el placer de consumir un rico postre. A casi nadie le desagrada un dulce, pero sí le disgustan sus repercusiones en la dieta, en este listado se muestran algunas de las calorías por ración de los postres más comunes.

        Arroz con leche: 150 calorías
          Helado de nata: 211 calorías
            Helado de vainilla: 161 calorías
              Helado de chocolate: 220 calorías
                Helado de chocolate “light”: 160 calorías
                  Merengue: 87 calorías
                    Milhojas: 379 calorías
                      Helado de leche: 219 calorías
                        Confitura: 250 calorías
                          Yogur: 120 calorías
                          Tips Para bodas en ARGLos postres constituyen uno de las categorías alimenticias que más calorías alberga. Las bebidas alcohólicas, por supuesto, siguen a los postres de cerca. Pero, vale marcar un punto: las bebidas fijan las grasas, cosa que no ocurre con los postres. Por lo tanto, no solo debemos tener en cuenta los números sino también las propiedades de cada sustancia que ingerimos. Es infinitamente más saludable, aprovechar las calorías comiendo una torta de chocolate, con crema y todo lo que se nos pueda ocurrir que, por ejemplo, beber una botella de Champagne o varios vasos de Whisky afirma un especialista en la ciencia de la nutrición.

                          Comentarios

                          Publicar un comentario

                          Entradas más populares de este blog

                          Opiniones Célebres

                          Sweet Paradise

                          Contáctanos